Me levante a media madrugada, sin poder consolar el sueño, una de esas noches de insomnio que de repente me atacan, donde la mente se da vuelo reflexionando en miles de cosas, algunas de las cuales de repente parecen no tener sentido. Decidí hacer una lista de las personas a las que me gustaría llamarles en cuanto el bebe haya nacido. Decirles de propia voz las buenas nuevas. Fue una lista corta, especial. Con nombres tan solo de aquellos individuos con las cuales quiero compartir ese momento tan trascendental de mi vida. La revisé a la mañana siguiente. Me provocó una enorme sonrisa reconocer tu nombre en la lista...aun cuando ni siquiera tengo tu numero de telefono...